Formentera es algo más que el último Paraíso del Mediterráneo en el que gozar de unas clásicas vacaciones de verano, rodeado de paz, tranquilidad y un entorno medio ambiental sorprendentemente conservado. Formentera ofrece asimismo al posible navegante una serie de posibilidades complementarias que aseguran una feliz estancia en la isla en cualquier época del año.
La bondad de su clima permite bañarse en el mar durante todo el año y la isla, sobre todo en otoño y primavera, ofrece su mejor aspecto para disfrutar de su magnífica luz e increíble color. Los tonos de su paisaje resultan mucho más armoniosos y limpios, liberados de la cegadora luz que invade Formentera en la época estival.
Una puesta de sol o una simple mirada al cielo y el mar se convierten en un espectáculo único que, por sí mismo, ya justifica una visita a la isla.
Situación geográfica
Formentera es la isla habitada más pequeña de las Baleares. Se encuentra situada al sur de la isla de Ibiza a tan sólo 2 millas náuticas de esta, aunque la distancia entre los puertos de Ibiza y La Savina (Formentera) es de 12 millas.
A pesar de tratarse de una isla pequeña, su forma recortada hace que tenga una gran extensión de costa (82 km.) en proporción a su superficie.
A lo largo de la costa hay muchas playas, de grandes y pequeñas dimensiones y numerosas calas y rincones solitarios en los que perderse.
La isla de Formentera es pequeña, pero repleta de bosques de pinos y Savinas, con sus salinas y por su interior rural. La isla de Formentera destaca por su gran belleza medioambiental y por su paisaje, aún salvaje, de dunas y playas, que se conservan en excelente estado, declarada Patrimonio de la Humanidad en 1999.
En cuanto desembarquemos en Formentera respiraremos ese aire de paz y tranquilidad que la caracterizan y la convierten en un lugar diferente. Enseguida nos cautivaran sus aguas, únicas por su transparencia y color turquesa sin igual que nos evocan atitudes tropicales.
Gracias a las praderas de posidonia oceánica, la más grande del Mediterráneo, declaradas par la Unesco Patrimonio submarino de la Humanidad (único en el Mediterráneo).
Espalmador
Si vas a Formentera, tienes que empezar por Espalmador, una isla semi desierta protegida y con una bahía con boyas para no dañar el fondo de Poseidonias. Es una experiencia única por lo que es importante que reserves boya si vas en temporada alta sino, no tendrás sitio libre.
Espalmador es un pequeño islote situado al Norte de Formentera. Tiene aproximadamente 2.925 m. de longitud y 800 m. de anchura. Su costa es acantilada, exceptuando una magnífica cala al Sur y otra, más pequeña, al Noroeste, que, por estar protegida por un pequeño islote, “Illa de Sa Torreta”, constituye un lugar ideal para el refugio de embarcaciones.
Cuidado con la entrada a Espalmador, hay un bajo muy peligroso que os lo indicamos en la foto del mapa.
También tiene una pequeña laguna fangosa en la que suelen bañarse y embadurnarse de fango los turistas que allí llegan con sus yates. Para llegar hasta ese punto, tienes que seguir desde la playa hacia la gran palmera en el centro de la isla.
Bañarse en el barro es una de las delicias de S´Espalmador, y además es muy divertido.
Si quieres llegar hasta ese punto, tienes que dirigirte al extremo norte de la Platja de s’Alga y seguir el camino estrecho de maleza de la parte trasera de la playa. Llegarás finalmente a una explanada salinera que tiene lodo líquido en el centro.
También puedes orientarte al seguir desde la playa hacia la gran palmera en el centro de la isla.
Aunque no tiene bondades terapéuticas, en un día soleado, es agradable y divertido rodar y embadurnarse de barro fresquito. Deja que se seque mientras caminas de vuelta a la playa y métete en el agua para salir limpio después. ¡Una experiencia diferente y a los niños les encanta!
Illetes
La playa de Illetes es el gran atractivo de Ibiza y Formentera. Las playas de Illetes, situadas en el punto más al norte de la isla, y el más cercano a la isla de Espalmador, (a escasos 150m.), son las más visitadas y concurridas por los turistas pero siguen conservando el encanto de las playas naturales y ubicadas en un entorno virgen sin cemento que arruine el paisaje.
Con una playa de finas arenas blancas y rosas, Illetes tiene una de las mejores aguas del Mediterráneo, donde poder fondear sin grandes peligros y con diferentes ofertas de chiringuitos, restaurantes, etc.
Nuestra recomendación de ruta
En Illetes te recomendamos el chiringuito “EL TIBURON”, un lugar muy agradable con precios de hotel de 5*, que ofrece unos buenos mojitos y mejores caipiriñas. Es necesario llamar para reservar mesa, siendo la comida de picoteo y la sangría de vino, champan, etc.
Muy cerquita tienes el “Big Sur”, un chiringuito donde la mayor parte de los clientes suelen ser Italianos. Un lugar ideal para los que le gusta mucho la fiesta.
También hay excelentes restaurantes de pescado, con precios elevados y en temporada alta es necesario llamar y reservar para evitar la desilusión.
En la zona también hay otros restaurantes, pudiendo en algunos de ellos comer con los pies en la misma arena. Todo un placer pudiendo disfrutar de un entorno idílico.
El extremo norte es la parte más tranquila de la larga playa y es el dominio de los naturistas, ya que es una playa nudista oficial y no tendréis problemas ya que la gente está acostumbrada “a todo”.
En el lado Este (levante) tenemos la playa de Llevant Situada también en la punta norte de la isla, pero en la zona de levante, como bien indica su nombre.
También es una playa de gran extensión y, aunque es la zona más cercana a Illetes y por lo tanto bastante transitada, debido a su longitud es posible encontrar sitios más tranquilos y solitarios, aunque naturalmente, no faltan los restaurantes y quioscos, y su cercanía con Illetes permite recorrer a pie todas las playas que hay al norte de la isla. Declarada Patrimonio de la Humanidad.
Esta costa en Veranos suele tener los vientos más intensos ya que suele soplar del este, cuidado con los fondeos en esta costa a simple vista se puede apreciar las diferencias en el oleaje.